Nada hay mejor que el reconocimiento al trabajo bien hecho.
Desde primeros de año he estado trabajando duro, siempre lo he hecho, pero ultimamente más.
El motivo es que voy a pasar a formar parte de una institución, para la que ya trabajaba, pero a la que no pertenecía "legalmente". Este cambio, que no he pedido, pero al que he aspirado siempre, en silencio, se traduce en ampliación de jornada, y mayor salario, claro.
Mi misión, desde hace 4 semanas que me lo comunicaron, ha sido embalar los 18 años de mi empresa, si es que eso es posible, en cajas, habiéndo seleccionado, primero, los expedientes aún vivos para dejarlos a disposición de quien los solicite, y segundo, los que ya se han resuelto y no se necesitarán en un futuro, salvo que sea para consultar algo concreto, subirlos al archivo general, adecuadamente ordenados.
Un trabajo lento y minucioso, pero que me ha hecho recordar todo lo que he vivido trabajando ahí. Esta empresa se creó a mediados del 90 y yo entré en ella a los pocos meses. Ahora se ha liquidado, y todo su patrimonio se ha cedido a su único accionista, el ayuntamiento de la ciudad donde vivo.
En esta sociedad hemos trabajado, codo con codo, dos personas: mi jefe, gerente de la empresa, y un administrativo, osea, yo. Hemos expropiado terrenos, realojado a vecinos, urbanizado zonas, contratado empresas constructoras, adjudicado viviendas a los afectados, hemos llevado hasta 7 obras distintas a la vez, y todo, todo, los dos solos.
El pasar a formar parte del ayuntamiento significa para mi más tranquilidad y mayor estabilidad económica, pero nunca pensé que me crearía cierta... como diría... cierta morriña.
Es increíble como pasa el tiempo, y como pasan cosas a tu alrededor que casi nunca uno provoca, o quizás sí, de una forma u otra.
Todavía no sé donde me pondrán, ni en qué departamento, ni junto a que personas, ni cuales serán mis funciones ... , y os mentiría si os digo que carezco de curiosidad e incluso de miedo ante lo desconocido. Pero lo que si puedo deciros con toda seguridad es que me siento orgullosa del trabajo que he realizado durante todos estos años, y espero poder sentirme igual dentro de 18 años.
Ya os lo contaré.