Victoria Station

Donde te encuentres... para lo que desees...

martes, 29 de abril de 2008

Expediente Sancionador

Como ya sabéis, estoy en un puesto de trabajo diferente al que estaba, y eso quiere decir que me dedico a hacer cosas distintas a las que he estado haciéndo estos casi 18 años que llevo en el Ayuntamiento.
Jamás pensé que me costaría tanto acostumbrarme al cambio. Y no lo digo porque haya pasado de currar poco a currar mucho. NO, de verdad, ni mucho menos. A mi me gusta trabajar, me gusta estar ocupada y tener cosas que hacer encima de mi mesa, porque sino, no se me pasa la mañana y las horas se me hacen eternas. Lo digo porque no es lo mismo aprender algo con 20 años que aprenderlo a los 40, así de sencillo. Dicen que las neuronas se mueren con el paso del tiempo, y yo intuyo que en mi comunidad están empezando a morir muchas de ellas, o quizás es que se han cambiado de piso, y ahora, en vez de estar en el cerebro, se han ido a vivir a otras zonas más cálidas y más cercanas al suelo, quizás. Será para no subir escaleras.
La cuestión es que he pasado de tenerlo todo supercontrolado, a no controlar nada, y eso, pues jode, que queréis que os diga.
Además esta nueva tarea consiste basicamente en intentar que el mogollón de expedientes que hay acumulados sobre mi mesa, salga. (Sobre la mesa donde me han colocado, y los expedientes ya estaban ahí cuando llegué) Lo que pasa es que me estoy dando cuenta que por mucho que lo intente, jamás lograré que descienda en altura, porque cada día llegan más, y más y más ... y así hasta el infinito.
Jamás terminaré, jamás veré la mesa limpia, y jamás de los jamases conseguiré sentir que estoy haciendo un trabajo productivo y que sirve de algo.
Tengo la sensación de estar en una peli del futuro. Me imagino con un cable saliendo de mi espalda, tipo Matrix, conectada para siempre a un ordenador general que me manda más y más expedientes... Por una sonda me alimentan con un líquido infecto que ni siquiera degusto porque no pasa por mi boca, y mis papilas gustativas ya se atrofiaron hace mucho... No necesito más sondas, ése líquido está diseñado para que no cree residuos y uno no necesite evacuar nada fuera de tu cuerpo. Todo con la finalidad de no levantarte de tu silla...
Condenada a una sanción eterna.

viernes, 25 de abril de 2008

Valladolid


Para no dejar que esto se enfríe, y después del rapapolvo de nuestra querida amiga Corde, vamos con lo que vamos.
Mañana me voy a Valladolid. Claro que sí.
Mi estado de ánimo es el menos indicado para ser compañía de nadie estos días, pero mi inestimable amiga, llamémosla X, (y no se dedica al porno) se ha apiadado de mí (y debe ser un poco masoca) y me ha invitado el fin de semana a esta bella ciudad.
Bueno, me estoy adelantando, en realidad, porque he de decir que solo he estado en Valladolid una vez en mi vida, de pasada hacia otro lugar. Me tomé unas cañas y me marché. No, miento, paseé por un parque repleto de pavos reales, que la verdad es que me moló, pero eso no creo que sea base suficiente para llamarla bella.
Rectifico. No tengo ni idea de cómo será esa ciudad, pero voy a descubrirlo.
Me marcho mañana por la mañana, bastante temprano. Nos llevan y nos traen by bus y voy a casi casi gastos pagados, cosa que me viene que ni al pelo porque tengo 62 euros en mi cuenta corriente y no cobro hasta el miércoles, imaginensé ustedes. (Es que el dinero sale de mi humilde cuenta todos los días, varias veces, y sólo entra una, y claro, ésa ecuación no da buenos resultados)
Tenemos un planning bastante calculado, ya que vamos con la empresa de mi amiga, a una especie de simposio (no sé si estará bien dicho), con lo que nos llevarán, casi de la manita.
Yo, conforme está mi cuerpo y mi mente estos días, lo agradezco, de verdad. No sería capaz de hacer nada, de motu propio, si no es porque me obligo a ello.
Echaré la cámara para ponerles algunas fotitos en el próximo post y les detallaré (pobres, no saben la que les ha caído) con pelos y señales (más señales que pelos), la ruta que hicimos y todos los chascarrillos que hayan acontecido en dicho viaje.
Si que sé que es tierra de vinos, así que me emborracharé a la salud de ustedes. (Los que me conocen no se creerán esto que estoy diciendo, porque siempre presumo de no beber alcohol, pero ¡voto a brios! que lo haré.

Lo dicho, que un besito grande.

Por cierto, Corde, que es broma lo del rapapolvo. Su post fue realmente delicioso y enternecedor y ha hecho usted que le demos un poco más importancia a esto de contarnos nuestras cositas.

Cuidaros todos y hasta pronto.

martes, 22 de abril de 2008

CANSANCIO ABSOLUTO







Necesito unas vacaciones. Me gustaría cerrar por un tiempo.
Pero no estoy hablando solo del blog. Me refiero a todo en mi vida.
Descansar... solo descansar...
Poder abandonarme. No pensar en nada



martes, 15 de abril de 2008

Tolerancia



Yo te escucho. Siempre escucho lo que tengas que decirme,
lo que opines tú..., quien esté más cerca de mí
y también quien no lo esté.
Pero me gusta el diálogo, el intercambio de opiniones.
Yo te aporto, tu me aportas.
No soporto los monólogos.
Si ves las cosas de distinta manera, no me importa lo más mínimo.
Me gusta que seas diferente a mi, todo es más interesante, más rico.
No me hagas comulgar con ruedas de molino.
Mantén tu carácter, tu ideología.
Habla conmigo.
Compartimos... y crecemos.

martes, 8 de abril de 2008

Dudas...


... y más dudas.
Pero, ¿quien no ha dudado alguna vez?
¿Quién puede presumir de saber exactamente lo que quiere en la vida?, porque yo no puedo... aunque pensándolo bien, también en esto que digo tengo mis dudas.
Me levanto por la mañana y no sé que ropa ponerme. Miro por la ventana, abro un poquito, y me asomo para oler el día... ¿lloverá tal vez?... Cierro de nuevo, ¡joer que rasca! y abro el armario mirando y requetemirando entre los cuatro trapos que tengo, a ver si hay alguno que se descuelga solo y me saca de la duda.
Voy a la cocina. Toca desayunar. No sé, ¿me caliento leche? o ¿la pongo fría en un bol y tomo cereales? Normalmente, después de un par de dubitativos minutos, acabo por echarme a la calle con el estomago vacío, solo, eso sí, mi vaso de agua mañanero al que necesito para tomarme unas perlas de aceite de onagra y la vitamina B1-B16-B12 para mi espalda.
Se echa una a las calles, coge el coche, y llega a su lugar de trabajo. ¿Ficho primero y luego me tomo el café? Anda, que noo, que tomateló y luego fichas, no seas petarda que te pueden ver... Y normalmente ficho y me subo directamente a la ofi, pensando que total, en un rato voy a salir a desayunar...
Para todo, en esta vida, hay que hacer elecciones.
Os he puesto estos ejemplos tan banales porque no quiero adentrarme en historias personales que forman parte de mi vida privada, que no bloggera, y que supondrían un desnudo casi integral de lo que siento, y ... como que no me apetece desnudarme ahora. Pero lo que tengo claro (o no, vaya usted a saber), es, que es muy difícil para mi tomar decisiones, sabiéndo a ciencia cierta si es lo mejor para mí, si en un futuro no me arrepentiré de la decisión tomada, o si, haciéndolo de este modo, no estaré, tal vez, dejándo escapar otra serie de oportunidades, que a la larga, me satisfagan más (¿se dice así?, vaya, otra duda más)
Dudo que esto cambie alguna vez, y que, con los años, me cueste menos tomar según que decisiónes.
Esperemos que todo sea para bien.